sábado, 27 de abril de 2013

Promesas, simples palabras

Cada ciertos días, me quedo pensando en la misma puta pregunta. ¿Por qué? ¿Qué es lo que hace que no tengamos ningún contacto? Eres tú, soy yo, ambos no sabemos nada. Lo echo de menos...
Hecho de menos esos mensajes de apoyo cuando yo más lo necesitaba, echo de menos tener aquel amigo que conocí, ese lazo que tuvimos desde el primer día en el que empezamos a hablar, esa conexión de una posible gran amistad. La confianza entre ambos con el tiempo, se va perdiendo poco a poco y llegará a un punto en el que se irá y quien sabe que pasará. Tengo ganas de contarte las cosas que me pasan, como si fuese como antes, ¿sabes? Hecho de menos tus muestras de interés, preocuparte por mí, ser simplemente amigos y viceversa. ¿Para qué coño prometes palabras con tanto valor? ¿Por qué prometes esto? Si es que es verdad, las promesas tan sólo están para romperse. Que asco. Ansio volver a hablar contigo, pero tengo miedo a molestarte, quiero que volvamos a ser amigos, pero que hago más para que puedas ceder, lo he echo todo, quiero un amigo, te quiero a ti.




No hay comentarios:

Publicar un comentario